¿Cuáles son los decretos eternos de Dios? En este sermón, el Dr. Martyn Lloyd-Jones examina esta pregunta observando lo que toda la Escritura dice acerca de Dios y Sus obras. La Biblia enseña que antes de que el mundo comenzara, Dios ordenó todo lo que habría de suceder. El gran plan se lleva a cabo en la creación y la providencia. Este decreto de Dios es Su plan para el mundo; abarca la creación, la caída y la redención. Incluso las cosas malas están bajo el control de Dios. Pero, como aclara el Dr. Martyn Lloyd-Jones, el mal nunca es causado por Dios, sino solo permitido. Es en este punto donde uno debe apelar al gran misterio de Dios. Las criaturas finitas nunca pueden entender, o comprender absolutamente, todo lo que Dios es y hace. La fe requiere descansar en los misterios de Dios. El gran misterio de los decretos soberanos y absolutos de Dios debe sostenerse en fe. Las personas no pueden confiar en sí mismas, sino solo en Dios. Los cristianos pueden hacer esto porque Dios es un Padre bueno y misericordioso que ordena todas las cosas para su bien y Su gloria. Esta doctrina del decreto de Dios debe dar gran esperanza porque los cristianos saben que Él es tanto un Dios de amor como el que tiene el control de todas las cosas.

La doctrina de los ángeles buenos es una de las grandes doctrinas de la fe cristiana. Los ángeles fueron creados por Dios antes de la creación del hombre, aparecen a lo largo de toda la Biblia, y los ángeles buenos sirven a Dios en muchas capacidades. Escuche este sermón del Dr. Martyn Lloyd-Jones mientras explora las Escrituras concernientes a los ángeles y al Dios que los creó. NOTA: No existe grabación de la siguiente conferencia titulada "El Diablo y los Ángeles Caídos".

El sufrimiento y el dolor rodean a la humanidad. En este sermón sobre la caída, el Dr. Martyn Lloyd-Jones explica lo que la palabra de Dios dice sobre la caída y el pecado. Contrario a muchas opiniones contemporáneas erróneas, el pecado y el mal no son principios eternos, ni el pecado es simplemente la ausencia del bien. Más bien, el pecado y el mal son el resultado de la rebeldía voluntaria de la humanidad contra Dios. Esta rebeldía trajo el pecado a un mundo perfecto. La Biblia relata esta historia en los primeros capítulos de Génesis, donde la serpiente engañó a Adán y Eva y los sedujo a la tentación. Esto no es simplemente un mito usado para ilustrar la caída del hombre en el pecado, sino que es la revelación de Dios de un evento histórico verdadero. En su estado original, las personas no tenían deseo natural de pecar, pero el pecado entró desde afuera a través de la tentación de Satanás. Esta caída no cambió la esencia de las personas, pero cambió su relación con Dios. Ahora que la humanidad ha caído y está alejada de la comunión con Dios, todos han perdido su justicia original, y su naturaleza ha sido totalmente corrompida. Por esto la humanidad y el mundo tienen una necesidad tan urgente del Salvador, Jesucristo.

¿Por qué hay tanto pecado en el mundo? En este sermón titulado "La Posteridad de Adán y el Pecado Original", el Dr. Martyn Lloyd-Jones examina la enseñanza bíblica de que el pecado de Adán afecta a todos. Cuando Adán se rebeló contra Dios, arrastró a toda la raza humana al pecado. Ahora todos nacen en un estado de pecado y alejamiento de Dios. El Dr. Lloyd-Jones examina diferentes teorías sobre cómo exactamente el primer pecado de Adán llevó a toda la humanidad al pecado, pero lo importante es recordar que la Biblia enseña que todos son afectados por el pecado. Pablo es claro en que todos son culpables delante de Dios, no solo por haber quebrantado la ley de Dios, sino también por las acciones de Adán. Esta doctrina explica por qué el mundo está lleno de pecado y maldad. Pero esta doctrina también es importante para entender correctamente lo que Jesús ha hecho. La Escritura dice que Jesús es el nuevo y mejor Adán que ha venido para revertir las acciones malignas del primer hombre.

¿Cómo ha afectado la caída de Adán a toda la humanidad? En este sermón sobre la contaminación original, el Dr. Martyn Lloyd-Jones busca responder esta pregunta mientras expone sobre el estado de la humanidad después de la caída. Él habla de cómo el pecado de Adán no solo ha hecho culpables a todos, sino que ha corrompido su propia alma. Esta contaminación no cambia la sustancia del alma humana, pero la tuerce e inclina continuamente hacia el mal. Esto no significa que las personas no se ajusten a ninguna noción del bien, sino que no hacen ningún bien espiritual. Aunque las personas tienen conocimiento de Dios, no es un conocimiento salvador y está suprimido en la injusticia. Esta naturaleza pecaminosa aliena a todos de la justicia de Dios. El principio de la humanidad pecaminosa, la carne, no es algo que simplemente marca el cuerpo, sino que corrompe tanto el alma como el cuerpo. Todos nacen en esta oscuridad e iniquidad. Aunque están contaminados y totalmente opuestos al bien espiritual, Dios prometió que proveería un salvador que redimiría a Su pueblo del pecado. Aunque todos son culpables y están contaminados, Dios en Cristo está reconciliando al mundo consigo mismo para crear un nuevo pueblo y una nueva creación.

Antes de la creación del mundo, antes del comienzo del tiempo, Dios tenía un plan para redimir al mundo. En este sermón sobre el plan de redención de Dios, el Dr. Martyn Lloyd-Jones proclama con valentía la verdad del diseño eterno de Dios para la obra de Cristo. Antes de los cimientos de la tierra, Dios el Padre, en Su plan soberano, eligió predestinar a un pueblo a través de la obra expiatoria de su Hijo, Cristo Jesús. Aunque todos están caídos y en pecado, Dios a través de Cristo, obra para traer no solo un nuevo pueblo, sino una nueva creación. Donde Adán falla en guardar el pacto de obras con Dios, Cristo el nuevo Adán logró la redención para la humanidad a través de la encarnación y de Su obra expiatoria en la cruz. Esta salvación es planeada por el Padre, adquirida en Cristo y aplicada por el Espíritu. Por lo tanto, la salvación es obra de Dios solamente. Este es el mensaje del Antiguo y Nuevo Testamento, y es revelado al pueblo de Dios a través de la palabra de Dios. Esta salvación no es obra de la humanidad, ni es una idea posterior en la mente de Dios, sino que la redención es el plan de la historia desde antes que el mundo comenzara. El pacto eterno entre el Padre y el Hijo es el plan, y por la obra de Cristo se lleva a cabo para Su pueblo.

¿Qué es un pacto? Generalmente se puede definir como un acuerdo o convenio que dos partes establecen sobre la base de condiciones preestablecidas. ¿Qué significa que Dios haya hecho un pacto con la humanidad? En este sermón titulado "El Pacto de Gracia en el Antiguo Testamento", el Dr. Martyn Lloyd-Jones ofrece un breve repaso de los pactos de Dios con la humanidad a través de la historia, destacando el pacto de gracia de Dios revelado en el Antiguo Testamento. Dios ha prometido ser Dios para su pueblo, y esto es significativo porque todos han pecado contra Dios, sin embargo, Él ha provisto un camino para que puedan declarar que Él es "mi Dios". Dios puede ser conocido a través de Jesucristo, su mediador que se ve en el Nuevo Testamento. Por lo tanto, el pacto de gracia ha sido administrado en dos partes, la antigua y la nueva. Aquí, el Dr. Lloyd-Jones se enfoca en el pacto de gracia administrado en el Antiguo Testamento. El pacto de obras de Dios con Adán, el pacto de gracia común con Noé, el pacto de justificación por fe con Abraham, y el pacto de la ley con Su pueblo en el Sinaí son diferentes pero están entrelazados. Finalmente, todos culminan en la persona y obra de Jesucristo. Si uno busca el evangelio en el Antiguo Testamento, ciertamente lo encontrará en lo que se conoce como el pacto de gracia.

¿Qué está en el centro de la fe cristiana? En este sermón sobre el Señor Jesucristo, el Dr. Martyn Lloyd-Jones responde a esta pregunta, predicando que a diferencia de todas las demás religiones, el cristianismo está centrado en un solo hombre, Jesucristo. Jesús no es simplemente un maestro moral genérico o un hombre sabio, sino que es Dios encarnado que murió por los pecadores. Por eso es tan vital entender quién es Jesús y lo que Él ha hecho. No es una cuestión de especulación doctrinal, sino la doctrina de Cristo en el centro de la vida cristiana y del evangelio. Se debe entender correctamente que Jesús es verdaderamente Dios y verdaderamente hombre sin mezcla. ¿Qué significa esto? Primero, la doctrina de Cristo nos dice que Dios mismo ha venido a morir y salvar a la humanidad. Dios se ha hecho hombre para redimir a los pecadores caídos y malvados. Además, nos dice que Jesús es un sumo sacerdote perfecto porque, siendo Dios y hombre, puede interceder a favor de la humanidad. Finalmente, este sermón nos llama a todos a hacernos la pregunta: "¿Creo yo? ¿Estoy confiando en Jesús?" Esta es la pregunta más importante que cualquiera puede hacerse.

"¿Qué significa que el Hijo de Dios se hizo hombre? Esta gran doctrina es lo que tradicionalmente se ha llamado la encarnación. Es Dios tomando una verdadera naturaleza humana para salvar a Su pueblo. En este sermón sobre la encarnación, el Dr. Martyn Lloyd-Jones predica sobre la gran importancia de esta doctrina, no solo para la teología, sino también para la vida cristiana. Advierte sobre dos errores principales al pensar en la encarnación. El primero es la idea errónea de que Jesús solo aparentaba ser hombre. Pero esto es falso, porque Jesús era tanto hombre como Dios como salvador. El otro error es creer que la segunda persona de la Trinidad fue cambiada en la encarnación, que la naturaleza misma de Dios cambió. Esto es falso porque no hubo mezcla de naturalezas, de modo que la naturaleza divina permanece completamente divina y distinta de Su naturaleza humana. Dios en la encarnación no solo era tanto Dios como hombre, sino que este hecho se declara en el nacimiento virginal. Hubo una concepción milagrosa en concordancia con la persona milagrosa que nació. Esta doctrina de la encarnación como se encuentra en la Biblia es la enseñanza de que Dios ha descendido a la humanidad como hombre para salvar a todos aquellos que creen en Él."

¿Quién es Jesucristo? En este sermón sobre la deidad y humanidad de Cristo, el Dr. Martyn Lloyd-Jones examina esta pregunta, considerando todo lo que las Escrituras dicen sobre la persona y obra de Jesucristo. Se le dan muchos nombres: Hijo de Dios, Mesías, Señor, y otros. Esto señala el gran hecho de que Jesús es verdaderamente divino. Se dice que es el creador del mundo, omnipotente y omnisciente. No es una simple criatura, sino Dios encarnado que vino a salvar a Su pueblo. Pero también era verdaderamente hombre. Era como los humanos que son tentados, pero nunca pecó. Sintió hambre, frío, y dormía. Sin embargo, siempre seguía siendo verdaderamente Dios y hombre mientras hacía todas estas cosas. ¿Por qué importa esto? Importa porque quién es Jesús no puede separarse de la pregunta de lo que Él ha hecho. En la cruz, Jesús murió para que todos los que creen en Él puedan ser salvos y hechos hijos de Dios. Es solo porque Él es Dios y hombre que puede salvar perfectamente.

¿Qué significa la Biblia cuando llama a Dios justo y justificador? Además, ¿era realmente necesaria la expiación? ¿Había otras alternativas? En este sermón sobre la expiación, el Dr. Martyn Lloyd-Jones explora estas preguntas en su serie continua sobre la Doctrina de la Expiación. Después de repasar sus siete argumentos previos sobre la perspectiva protestante de la expiación, presenta su última y final razón: la Biblia enfatiza la muerte en la cruz como una necesidad absoluta. Al explorar las palabras de Jesús en el Jardín de Getsemaní y las epístolas de Pablo, el Dr. Lloyd-Jones presenta una imagen clara de la visión bíblica y protestante de la expiación. El Dr. Lloyd-Jones también aborda algunas objeciones contra la doctrina general de la expiación y la doctrina específica de la expiación sustitutiva penal. Este sermón del Dr. Lloyd-Jones es útil ya que presenta argumentos a favor y en contra de esta gloriosa doctrina de la expiación y ofrece una comprensión sólida de la salvación y la justificación solo por Cristo.

Además de recibir el castigo por el pecado en la cruz, ¿qué más logró la muerte de Jesús? En este sermón sobre la victoria de Cristo en la cruz, el Dr. Martyn Lloyd-Jones explica que la muerte de Jesús no fue solo un acto pasivo de recibir la ira de Dios, sino también una señal activa de victoria. El Dr. Lloyd-Jones enfatiza que esta naturaleza victoriosa de la expiación no es una negación de la sustitución penal. Jesús vino primero y principalmente a llevar el castigo por el pecado. Esta doctrina no lo elimina; lo complementa. Jesús fue más allá de cargar pasivamente con el pecado, y derrotó activamente a todos los enemigos en la cruz. El Dr. Lloyd-Jones destaca tres enemigos que Jesús destruyó. Primero, Jesús derrotó a Satanás. Lo avergonzó en la cruz. Segundo, Jesús venció la muerte. La muerte ya no reina sobre los hijos de Dios. Y tercero, Jesús derrotó el pecado. Aunque los cristianos todavía pecan, ya no están bajo el poder del pecado. Como resultado, todo el universo es afectado por la muerte de Jesús. Jesús se enfrentó y removió a todos los enemigos de Su pueblo.

¿Cuáles son los resultados y consecuencias de la expiación? En este sermón sobre las bendiciones del pacto, el Dr. Martyn Lloyd-Jones explora el nuevo pacto establecido en el Calvario por la sangre de Jesucristo. El Dr. Lloyd-Jones regresa a las leyes y sacrificios del Antiguo Testamento que proporcionan el contexto para la enseñanza del Nuevo Testamento sobre este decreto salvador y el significado de Jesucristo como Salvador y Sumo Sacerdote. El Dr. Lloyd-Jones también aborda el tema del antinomianismo y cómo el pacto eterno bajo Jesús disipa el pensamiento erróneo. El pensamiento claro sobre el nuevo pacto llena al creyente de valentía, certeza y confianza en su acceso a Dios. Cuando los hijos de Dios están unidos con Cristo, Su perdón de pecados es aplicado a su cuenta y viven en continuo gozo y paz delante de Él.

Los cristianos tienden a pensar solamente en la expiación de la muerte de Cristo por el pecado. En este sermón sobre el Dominio y Reino de Cristo, el Dr. Martyn Lloyd-Jones enseña que hay muchos aspectos de la creación de Dios que son afectados por la muerte de Cristo. No se debe pensar que el perdón de los pecados es el único beneficio de la expiación. Incluso el mismo Señor Jesucristo ha sido afectado por Su obra en la cruz. ¿Qué debe entender el oyente de estas cosas? El Dr. Lloyd-Jones examina las Escrituras para mostrar cómo los beneficios comunes o la gracia común llega a la humanidad como consecuencia de la muerte del Señor Jesucristo. Escuche mientras predica sobre las bendiciones que reciben los incrédulos y los ángeles como resultado de la obra expiatoria de Cristo. Escuche mientras el Dr. Lloyd-Jones considera la gloria especial y nueva que el Señor Jesucristo recibe en la encarnación. Es solo como resultado de Su muerte obediente en la cruz que Él recibe esta gloria peculiar. Finalmente, al ser testigo de la crucifixión, se aprende sobre el reinado mediador de Cristo y lo que significa para la iglesia mientras Él gobierna y reina sobre ella.

¿Cuándo comenzó el Espíritu Santo Su obra? ¿Fue solo después de Pentecostés o estuvo activo y presente antes de ese importante día? En este sermón sobre el papel del Espíritu Santo en la creación y la gracia común, el Dr. Martyn Lloyd-Jones explica su método de aproximación cuando se enfrenta a doctrinas o declaraciones difíciles en las Escrituras, incluyendo el tema del Espíritu Santo. Al examinar la evidencia bíblica, se puede decir con confianza que el Espíritu Santo se manifestó antes del día de Pentecostés. Se manifestó en la creación del mundo; es decir, operó en la creación sustentándola. El Espíritu Santo también se manifiesta a través de la gracia común. La gracia común, explica el Dr. Lloyd-Jones al oyente, son las bendiciones generales aplicadas a todos según el placer y la voluntad de Dios. La gracia común se ve en todas partes. La cultura está llena de gracia común y ayuda a entender cómo Dios obra para mantener el orden mediante el gobierno y la restricción del pecado, así como el gozo y placer experimentado a través del arte, la música y la ciencia. La conciencia presente en todos se manifiesta en la moralidad y la religión que impregna las culturas. Pero la moralidad, la política, las religiones y la belleza no son el punto principal. Todas estas cosas, estas marcas de la gracia común, glorifican a Dios porque es solo a través del Espíritu que los dones son distribuidos a la humanidad.

¿Qué hace tan único a Pentecostés? Ciertamente, no fue la primera vez que el Espíritu Santo descendió sobre un creyente. Sin embargo, debe haber algo especial sobre este acontecimiento. ¿Cuál es el significado de la venida del Espíritu Santo en Hechos 2 en Pentecostés? En este sermón sobre el significado de Pentecostés, el Dr. Martyn Lloyd-Jones explora la operación del Espíritu a lo largo del Antiguo Testamento, contrastando la obra del Espíritu entre los santos del Antiguo Testamento con la obra del Espíritu en el Nuevo Testamento. En Hechos, el Espíritu es derramado sobre todos los creyentes de una manera que une al diverso pueblo de Dios en un solo cuerpo. Escuche mientras examina este evento en Jerusalén, seguido por derramamientos similares en Samaria y Éfeso. Lo que uno descubre es que el resultado de Pentecostés es la formación de la iglesia de Cristo. El cuerpo de Cristo es unido en uno solo. El Dr. Lloyd-Jones explica que este evento ocurrió una vez, para nunca más repetirse. La iglesia ha sido establecida y desde ese momento, cada creyente es habitado por el Espíritu Santo en Su plenitud. El oyente es llevado a alabar a Dios por el don del Espíritu Santo, quien mora con ellos y está en ellos.

El llamado del evangelio va a todos, pero solo algunos son salvos. Algunos no son salvos. ¿Cuál es la diferencia? En este sermón titulado "El Llamamiento Eficaz", el Dr. Martyn Lloyd-Jones examina que mientras el llamado del evangelio va a todos, este llamamiento eficaz va a aquellos que serán salvos. Por sí misma, la humanidad es incapaz de cualquier actividad espiritual verdadera. Nadie puede conocer las cosas de Dios. Entonces, ¿cómo llega uno al punto de discernir y deleitarse en la verdad de Dios? El Dr. Lloyd-Jones rastrea la teología de este llamamiento eficaz a través de las Escrituras. En él, demuestra que este llamado eficaz es lo que permite a los cristianos recibir el evangelio. Es la operación interna del Espíritu Santo sobre las almas de la humanidad. Produce cambio. Y como este llamamiento es la obra del Espíritu, es absolutamente cierto. La persona llamada ahora deseará la verdad de Dios. Son capaces de conocer las cosas de Dios. Esto no es algo que hayan hecho por sí mismos, sino que es la obra de Dios. Son, por lo tanto, deudores solamente a la misericordia. Escuche, mientras el Dr. Lloyd-Jones declara: "Soy lo que soy por la gracia de Dios."

¿Cómo Dios quita el pecado y hace nueva a una persona? En este sermón sobre la regeneración, el Dr. Martyn Lloyd-Jones explica que es el resultado de la obra del Espíritu Santo de Dios aplicando la obra de Cristo a los corazones y mentes de aquellos que son llamados según Su voluntad. Cuando las personas reciben el don de la gracia de Dios por la obra del Espíritu, son transformadas y renovadas. Son nuevas criaturas y parte de la nueva creación que Cristo ha traído y traerá. La transformación que produce la regeneración no cambia la sustancia de las personas, pero renueva sus mentes y les da nuevos deseos. Estas nuevas disposiciones otorgadas por el Espíritu resultan en una nueva vida. Esta es la vida del cristiano que busca amar a Dios y a su prójimo. Les hace amar cosas nuevas que antes despreciaban, y les hace odiar cosas viejas que antes amaban. Esto es producido por la obra soberana de Dios en la vida de los pecadores que Él elige renovar y adoptar en Su familia. Esta obra no puede ser percibida directamente, ni puede ser entendida completamente, pero es el comienzo de la nueva vida. Es un nuevo nacimiento que reorienta total y completamente la voluntad y los deseos de un pueblo que antes era pecador. Es la fuente de la nueva vida en Cristo.

¿Por qué algunos creen en el mensaje de Cristo mientras otros no? En este sermón titulado sobre el nuevo nacimiento, el Dr. Martyn Lloyd-Jones responde a esto apelando a la doctrina bíblica del nuevo nacimiento. Este nuevo nacimiento es un acto de Dios mediante el cual Él regenera los corazones y las mentes de las personas caídas. De este acto de regeneración surge la nueva vida con nuevos deseos y disposiciones. Esta nueva persona vive una vida capacitada por el Espíritu que evidencia la obra sobrenatural de Cristo. En esto se ve que la regeneración no solo cambia la posición de uno ante Dios, sino que transforma sus propios corazones y mentes. Debido a que esta nueva vida es producida por la obra del Espíritu, es guardada por la obra del Espíritu, de modo que una vez que una persona ha nacido de nuevo, no puede perder esta nueva naturaleza. La nueva persona no puede volver a ser vieja, porque es el Espíritu quien la forma y la guarda. Una vez que el Espíritu transforma al creyente, este buscará una vida que honre a Cristo. Esta búsqueda de Cristo y Su reino no hace nueva a la persona, sino que es el resultado de que el Espíritu la regenere y la haga una nueva creación en Cristo Jesús el Salvador.

¿Qué es la regeneración y cómo puede uno saber si ha ocurrido en su vida? En este sermón sobre la regeneración titulado "Un Hijo de Dios en Cristo", el Dr. Martyn Lloyd-Jones aborda estas preguntas mientras guía a través de pasajes clave en 1 Juan y Gálatas. El Dr. Lloyd-Jones muestra sistemáticamente cómo la salvación se evidencia en la vida del creyente. La regeneración ocurre cuando Dios implanta vida espiritual en las personas. La regeneración auténtica se demuestra en aquellos que viven bajo el señorío de Jesucristo al manifestar externamente Su santidad. Pero, ¿cómo se ve esto? Un creyente genuino mostrará esta regeneración en su amor por otros creyentes, convicción de pecado y deseo por las cosas espirituales. Nadie puede producir esto por sí mismo. La regeneración significa unión con Cristo. Como Jesús enseñó en los evangelios, la relación del creyente con Él es similar a la interacción de una vid y sus ramas—así como una rama no puede prosperar ni sobrevivir sin el sustento de la vid, el cambio en la vida de un creyente no puede ocurrir separado de su unión con Cristo.